El Presidente de Microsoft, Brad Smith, se refirió a la agitación en OpenAI, aclarando que los problemas que llevaron al despido de Sam Altman y su posterior reincorporación no estaban relacionados con la seguridad de la IA.
Smith declaró a la BBC: "No se trataba fundamentalmente de una preocupación de ese tipo", descartando las especulaciones de que el despido se debiera a un descubrimiento peligroso en la empresa de IA.
En medio de una semana turbulenta, se lanzaron numerosas acusaciones contra OpenAI. Se hablaba de que OpenAI estaba sentada sobre un potencial modelo de riesgo denominado Q*pero esto no ha servido de mucho y es probable que sólo sean rumores.
Sin embargo, la sensación general dentro de OpenAI era que Altman estaba quizás laissez-faire en el desarrollo de modelos en una empresa cuyos principios fundacionales son desarrollar una IA segura en beneficio de toda la humanidad: intenciones audaces, sin duda.
Al final, OpenAI no ha confirmado ni desmentido oficialmente que la seguridad fuera el gran problema que abrió una brecha entre Altman y la junta directiva.
La relación de OpenAI con Microsoft es profunda, y la empresa estuvo muy cerca de adquirir a Altman y a su cofundador Greg Brockman, junto con más de 700 empleados, que amenazaron con abandonar OpenAI si Altman no era readmitido.
A pesar de los rumores que sugerían un desacuerdo sobre la seguridad de la IA, Smith recalcó que no era así. Afirmó: "No creo que sea así en absoluto. Creo que obviamente hubo una divergencia entre la junta y otros". Smith destacó además la continua asociación entre OpenAI y Microsoft, afirmando su fortaleza
El incidente ha llamado la atención de numerosos líderes tecnológicos, incluido Elon Musk, que expresó sentimientos encontrados sobre la situación y expresó su preocupación por el proceso de toma de decisiones de la junta.
Musk afirmó que, en última instancia, lo mejor es que OpenAI se mantenga separada de Microsoft, ya que así se evita que el poder en la industria se aísle aún más.
Microsoft obtiene un puesto de observador sin derecho a voto en el consejo de OpenAI
Microsoft ha ganado un puesto de observador sin derecho a voto en el consejo de OpenAIcoincidiendo con la reincorporación oficial de Sam Altman como CEO de OpenAI. Este anuncio del 30 de noviembre de 2023 refleja la evolución de la dinámica entre Microsoft y OpenAI.
El consejo de OpenAI se ha reorganizado con Bret Taylor como presidente, Larry Summers y Adam D'Angelo, antiguo miembro del consejo. La incorporación de Microsoft como "observador sin derecho a voto" marca una nueva fase de transparencia e implicación del gigante tecnológico en OpenAI, pero aún no se sabe qué significa realmente para ambas partes.
Altman, en un nota oficial a los empleados de OpenAI tras su reincorporación, expresó su entusiasmo y gratitud.
Nunca he estado tan ilusionado con el futuro. Estoy muy agradecido por el duro trabajo de todos en una situación poco clara y sin precedentes, y creo que nuestra resistencia y espíritu nos distinguen en el sector. Me siento muy, muy bien sobre nuestras probabilidades de éxito para lograr nuestra misión".
También alabó la lealtad y el apoyo de los clientes de OpenAI, señalando: "El hecho de que no hayamos perdido ni un solo cliente nos impulsará a trabajar aún más por ustedes".
Altman esbozó tres prioridades inmediatas para OpenAI: avanzar en sus esfuerzos de investigación y seguridad, mejorar y desplegar sus productos, y trabajar estrechamente con la nueva junta en la gobernanza y una revisión independiente de los acontecimientos recientes. Quizá entonces sepamos por qué han despedido a Altman.
Expresó su confianza en el futuro de la organización: "Estoy deseando terminar el trabajo de construir una AGI beneficiosa con todos ustedes: el mejor equipo del mundo, la mejor misión del mundo".
