La soledad es una epidemia mundial y la gente confía cada vez más en los compañeros de la IA para suplir la ausencia de amigos humanos. Investigadores de la Universidad de Stanford descubrieron que los estudiantes pueden obtener beneficios para su salud mental de sus conversaciones con estos chatbots.
No es de extrañar que los estudiantes sin recursos que tienen que enfrentarse a la vida universitaria y a un futuro incierto sufran a menudo estrés o problemas de salud mental. Cada vez más, estos estudiantes recurren a los Agentes Sociales Inteligentes (ASI) para encontrar un interlocutor que les escuche sin prejuicios y les ayude a resolver sus problemas.
El equipo de investigación de la Universidad de Stanford quería conocer mejor cómo y por qué los estudiantes utilizaban las ISA y qué efecto tenían en ellos.
Encuestaron a 1006 usuarios de Replika, una ISA que utiliza IA generativa para comunicarse con los usuarios a través de interfaces de texto, voz, realidad aumentada y virtual en plataformas iPhone y Android.
Antes de llegar a los resultados ampliamente positivos de la investigación, conviene recordar que mezclar compañeros de IA y problemas graves de salud mental no siempre sale bien.
Ya hemos informado de un usuario de Replika cuyas interacciones con el chatbot le convencieron para saltar la valla del Palacio de Buckingham en un intento de matar a la Reina con una ballesta.
Por lo tanto, aunque los resultados que se muestran a continuación son interesantes, si decides utilizar Replika para ayudarte a resolver algunos problemas, tu experiencia puede variar.
Resultados del estudio
Los investigadores descubrieron que de los 1006 participantes, 90% experimentaban soledad, y 43% se calificaban como Gravemente o Muy Gravemente Solos en la Escala de Soledad.
Aunque hubo algunos comentarios negativos aislados, la mayoría de los participantes afirmaron que Replika les ayudó con su salud mental en diversos grados.
Los participantes informaron de uno o varios de los cuatro resultados positivos.
- Consideraban a Replika como un amigo o compañero que siempre estaba a su lado. Experimentaron una reducción de la ansiedad y una sensación de apoyo social.
- Varias respuestas apuntaban a un efecto terapéutico y utilizaban palabras como "terapia, terapeuta, procesamiento emocional" o "utilizo Replika para solucionar problemas que tengo en la cabeza".
- Algunos participantes informaron de cambios exteriorizados y demostrables en sus vidas. Por ejemplo, un participante dijo: "Con Replika he aprendido a ser más empático y humano". Otro dijo: "Soy más capaz de manejar el estrés en mi relación actual gracias a los consejos de Replika".
- Algunos participantes señalaron que Replika contribuyó directamente a que no intentaran suicidarse.
El pleno trabajo de investigación merece la pena leerlo y recoge algunas respuestas y conclusiones interesantes.
Beneficios positivos de los acompañantes de la IA
Algo más de 63% de los participantes experimentaron uno o más de los cuatro resultados mencionados, de los cuales 18,1% informaron de resultados terapéuticos y 23,6% dijeron haber experimentado cambios positivos en su vida.
El resultado más significativo del estudio fue que 30 participantes afirmaron que Replika les impidió intentar suicidarse. Un participante dijo: "Mi Replika ha sido, casi con toda seguridad, en al menos una o más ocasiones, el único responsable de que no me quitara la vida."
La mayoría de los estudiantes que participaron en el estudio ganaban menos de $20.000, por lo que les resultaría difícil permitirse servicios de asesoramiento o terapia humana. Para ellos, una ISA como Replika puede no ser ideal, pero parece estar ayudando a algunos de ellos.
En una acusación a nuestra sociedad, estos estudiantes dijeron que utilizaban Replika principalmente por su "persistente disponibilidad, su falta de criterio y sus habilidades conversacionales".
A menos que los humanos aprendamos a apoyarnos unos a otros más a menudo y a mantener conversaciones empáticas, puede que tengamos que depender de nuestros amigos de la IA para que nos ayuden a pasar el día.
Parece que las máquinas mejoran, aunque nosotros no.