El Viceprimer Ministro británico, Oliver Dowden, se dispone a advertir a la comunidad internacional sobre el potencial de la IA para desestabilizar el orden mundial.
En su intervención ante la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) en Nueva York, Dowden insistirá en la urgencia de regular la IA, ya que su rápido desarrollo podría superar las capacidades gubernamentales para garantizar su seguridad.
El Reino Unido se prepara para acoger en noviembre la Cumbre Mundial sobre Seguridad de la Inteligencia Artificial, centrada en su regulación.
Dowden declarará: "Se ha dado el pistoletazo de salida a una carrera competitiva mundial en la que tanto empresas individuales como países se esforzarán por llevar los límites lo más lejos y rápido posible".
Además, destacará que la normativa mundial va a la zaga de los avances actuales en IA. El ritmo extremo de desarrollo de la IA está haciendo que la tecnología sea difícil de captar mediante leyes y normativas.
Dowden insistirá en que no se debe dejar que las empresas de IA "se marquen sus propios deberes", haciendo hincapié en la necesidad de que los gobiernos y los ciudadanos confíen en que los riesgos asociados a la IA se abordan adecuadamente.
Sin embargo, Dowden también advertirá contra considerar la IA estrictamente como una fuerza para el bien o para el mal, señalando que "será una herramienta para ambos". La naturaleza de doble uso de la IA también complica la mecánica de la regulación, ya que los algoritmos necesarios para "hacer el bien" también pueden ser los que pueden infligir daño.
Warner también destacó el cambio en el discurso sobre la seguridad de la IA, afirmando que este tema se ignoraba en gran medida hace unos años.
Varias empresas líderes en IA coinciden en la necesidad de regulación. La estadounidense Primer Foro AI Insight tuvo lugar este mes y contó con el acuerdo mutuo de los asistentes de toda la industria de la IA, incluidos Elon Musk y el CEO de OpenAI, Sam Altman.
Sin embargo, Yasmin Afina, investigadora de Chatham House, dijo a la BBC que Alcanzar rápidamente un acuerdo internacional sobre IA será todo un reto. Comparó la complejidad de la IA con las armas nucleares, señalando las largas negociaciones necesarias para los acuerdos nucleares.
Afina también hizo hincapié en la importancia de incluir a las comunidades marginadas y a los países más pequeños en estos debates para garantizar que no se les deja de lado. La gran mayoría de las conversaciones en torno a la regulación de la IA se centran en China, Estados Unidos y Europa.
Warner, que formó parte del ya disuelto consejo de IA que asesoraba al Gobierno, cree que el Reino Unido puede liderar la tecnología de seguridad de IA, siempre que se invierta lo suficiente.